El perder un ser querido del entorno familiar es uno de los dolores más fuertes y traumáticos que puede experimentar una persona o una familia. En ese ámbito perder a la mascota de la familia también es una experiencia muy dura e impactante que debe enfrentar la familia, y más aún con niños chicos.
Muchas veces la mascota es el fiel compañero de tu hijo, de tu hija, o ha sido tu compañero por largos años, pasando a ser un miembro de la familia. En muchas ocasiones han sido fuente de enseñanzas y responsabilidad para los niños, o de apoyo para abuelos o compañía para matrimonios jóvenes.
Cuando llega el momento de despedir a tu mascota y darle el descanso que se merece es muy importante que te hagas cargo de sus restos. Una opción es cremar sus restos que tiene una serie de consecuencias y beneficios para ayudar a que perdure su memoria entre los que lo han querido y apreciado.
La cremación de mascotas se ha convertido en el método preferido por las familias y dueños de mascotas por numerosas razones.
Saber que sus restos siempre estarán contigo
La oportunidad de enaltecer el recuerdo de su mascota es una de las principales razones por las que la cremación se ha vuelto la mejor opción entre los dueños de mascotas. Saber que los restos de tu mascota no estarán enterrados bajo el suelo, ni se descartarán de ninguna otra manera, ayuda a algunas personas a enfrentar mejor la perdida. Muchos dueños de mascotas encuentran consuelo en poder controlar la forma en que se esparcen las cenizas. O poder crear un espacio que genere un recuerdo especial y memorable, para ello muchas personas eligen guardar las cenizas en un ánfora en su casa.
Ayudar a despedirlo
La cremación de mascotas ayudara en el duelo y a despedirlo, haciendo menos traumática en lo emocional la despedida, sino que también hay beneficios que vienen con esta forma de preservación. Los beneficios asociados con la salud y el medio ambiente son algunos de los más importantes. Muchas comunidades en todo el país han establecido leyes locales que prohíben a los propietarios enterrar mascotas en propiedades públicas o privadas debido a los peligros involucrados. La primera es que muchos funcionarios del gobierno local no quieren alentar a los residentes a cavar en sus patios traseros para tener la oportunidad de golpear las alcantarillas, el gas u otras líneas subterráneas de servicios públicos. Si tienes que cambiarte de vivienda podrás llevarte sus cenizas en el ánfora a tu nueva vivienda.
Los riesgos de contaminación y zoonosis al enterrarlo
Podrías considerar enterrar tu mascota en el jardín, parcela o plaza. Con esta opción existe un riesgo en la preparación y manipulación que con lleve a contaminarte con alguna enfermedad que ha fallecido. En segunda instancia al enterrar a tu mascota podría conducir a la contaminación de los suministros de agua subterránea y causar toxicidad, lo que eventualmente podría provocar enfermedades y la propagación de alguna enfermedad. Podría ocurrir que otro animal desentierre a tu mascota para comérsela y se contamine la mascota y todo el lugar.
Aunque todavía hay numerosas ciudades que permiten el entierro de mascotas en propiedad privada, esta prohibido enterrarla en plazas públicas, existen pautas específicas que las personas deben cumplir para enterrarla correctamente que no son muy trabajosas y poco agradables, desde efectuar un hoyo con una profundidad con de al menos 70 cm, colocar una capa de cal por encima y por debajo del animal, perforar su intestino y estomago para que se liberen los gases y posteriormente taparlo y compactar la tierra y volver a colocar el pasto o plantas, proceso que podría llevar fácilmente 1 hora).
También es importante contar con la autorización por escrito del propietario de la propiedad si uno no es dueño de la propiedad donde reside. También existen decretos municipales que rigen la distancia aproximada en la que se puede enterrar un cadáver cerca de un cuerpo de agua, por ejemplo, un río o lago que deben cumplirse para no exponerse a una multa.
Muy económica comparada con un cementerio de mascotas
La cremación es una solución extremadamente económica si la comparamos con el costo de enterrar a tu mascota en un cementerio de mascotas, en el cual deberás pagar por el derecho de espacio, entierro y después un gasto anual correspondiente a su mantención anual. Después de 3 o 4 años tendrás la opción de reducir sus restos (Concepto de reducción) para ser trasladados a un cinerario, lugar que tendrá un valor de mantención inferior al del cementerio. Si lo compramos con el costo de cremarlo, elegir un ánfora para guardar las cenizas lo que no tendrá un costo de mantención anual.
Cremarla… ¿Que debo preguntar?
Al tomar la decisión de cremarla, siempre es necesario investigar y realizar comparaciones de precios, ya que algunos crematorios para mascotas son ciertamente más costosos que otros. Varias cosas para pensar que pueden afectar el costo son su ubicación, el tamaño y el peso de su mascota, y el tipo de cremación que elija, entre otros aspectos. También va a ser importante preguntar sobre el tipo de ánfora en que es entregada. También las mismas veterinarias te ofrecen el servicio, el cual es proporcionado por un crematorio externo. Hay una serie de preguntas que debes efectuar para realizar la correcta elección, en nuestra sección preguntas y respuestas podrás encontrarlas
Despedirlo en forma apropiada
El cuidado de los restos de su mascota es probablemente una de las últimas cosas en las que desea pensar mientras enfrentas el dolor de una pérdida junto a tu familia. Comunícate con nosotros, te ayudaremos y efectuarnos las mejores recomendaciones para los preparativos finales, por difíciles que parezcan.